enero 28, 2011

Sin Teca por ahí:


Creo que no les he contado que soy mucho mayor que Teca por eso tengo amigas que no son amigas de ella.
Eso le da a Teca un poquito de ansiedad cuando me le pierdo porque ando por otros caminos que no son los de ella. Por supuesto no la puedo llevar conmigo, existen cosas solo para los adultos. No es que lo sea yo tanto, pero no puedo negar que ya lo soy.
Así que decidí pasarme unos días a lo grande con los grandes. Ja ja aja.
Tengo amigos muy hermosos por lo que dicen o lo que escriben, y he reencontrado otro/as que extrañaba porque con su presencia le hacen a una la vida más feliz. 
Todas conocen a Teca así que preguntaban por ella constantemente. A todas expliqué lo liada que anda mi amiga con sus deberes escolares, pero que goza de muy buena salud.
Algunos de ello/as también gustan de andar entre pequeños y eso hace más interesante nuestra amistad. Y no digo que los otros no gusten de los más pequeños. ¡Que va! si mis amigos y amigas tienen todos bien despierta la infancia que llevan dentro de sí. Eso precisamente es lo que me hace disfrutar de su compañía tanto como los ratos que paso entre Teca y nuestros amigos de la biblioteca.
Fíjense ustedes ayer mismo tomaba un café mientras dialogaba en Patio Vesubio con Lector Cómplice, (ella es como Teca, le encanta conocer el mundo) cuando  llegó   Angels la de las Siete Historias, para regalarme un nuevo libro pero Sin Bitacóra acabada de llegar nos enredó con un nuevo tema. Así que la cháchara giró a nuevos temas sobre libros y más libros que conocer.
Las cuatro salimos a dar un paseo por esta Ciudad Escrita que nos hemos inventado, con árboles frondosos llenos de verbos, sustantivos y adjetivos maravillosos que hacen la vida hermosa. 
Es que en nuestro Pueblo de Sombras, el aire tiene más pureza cuando nos reunimos porque sabe que nada es más fructífero que el placer de la amistad.
Así que hoy decidimos sentarnos en el parque del centro del pueblo a esperar por Melina que andaba por el hospital realizándose un análisis de adnliterario, dicen que es algo para medir el goteo de las palabras que fluyen en la mente por minuto.
¡Qué cosa más rara! Cuando llegue nos explicará qué tal le fue.
Olvidaba contarles que la última vez cuando nos vimos Karine Na la más pequeña/adulta de nuestro grupo contó de una Oscura Forastera que vaga por el pueblo en las madrugadas. Le hicimos prometer que nada contaría a los más pequeños porque hasta el nombrecito tiene su cosa y vaya que los niños se asusten.
Aunque... ahora que recuerdo bien creo que Susi de La Torre aclaró que no era oscura sino clara como la luz del día con unas ideas maravillosas que harían sonreír hasta al más infante de nuestros curiosos amiguitos.
Yo por si acaso no me levantaré más de madrugada. Ya con los murmullos de mina que siento al acostarme, es suficiente.
Hoy en la noche iremos al cine a ver el estreno de “KILLO y PISHA” dicen que ya tiene más de una nominación para ser premiada. Así que no podemos dejar de llevar a los pequeños recuerdo cuánto les gustó A quemarropas la última que disfrutamos juntos todos.
Pienso que si invito al cine a mi amiga Teca me perdone por mis horas de ausencia en las que también soy feliz entre mis nuevos amigos porque río, aprendo, conozco nuevos parajes por donde pasearme, cuando no estoy con ella.
Para el mes próximo cuando la estrenen iremos al teatro a ver “El canto del Caribe” . Pero eso se los contaré cuando veamos la obra.
Ahora me voy si alguien de ustedes está interesado en visitar nuestro pueblo será BIENVENIDO así que les dejo las direcciones de los sitios donde nos pueden encontrar, lo mismo a los adultos que a los más pequeños. Solemos vernos por allí, si olvido alguna no se preocupen en cualquiera de estas encontraran el mapa completo de nuestro HERMOSO PUEBLITO.



















enero 24, 2011

"Los Muros"

Cuentos de Cuentaquetecuento:


Tengo temor a saltar muros no es porque soy cobarde, algo me pasa con
las alturas. Subir un muro lo hago con facilidad pero cuando estoy arriba y tengo que saltar todo se complica.

Hablando de muros recuerdo a nuestra amiga Teca.

Deben saber que hay muchos tipos de muros, altos, pequeños, gruesos, finitos, de ladrillos, bloques, madera, pueden encontrar muchas formas, colores, tamaños hasta ahí la cosa. Teca conoce uno diferente.

No estoy loca ella cuenta que conoce un muro que habla.

Realizando tareas de la escuela los más grandes de nuestra pandilla investigaban sobre la “Muralla China”, muro gigante con más de seis mil kilómetros de largo y como 7 metros de altura. Una muralla hecha de piedra.

Averiguábamos si era el muro más grande del mundo cuando de pronto se escuchó la voz de Teca - Puede que sea el más grande pero no habla- la miramos – no me miren como si fuera un bicho no habla he dicho-.

Alberto le respondió:- Tequita ¿desde cuándo un muro puede hablar? hay grandes, altos, fuertes, largos, como el de Berlín en Alemania, el de Adriano en Islas Británicas pero no hablan-.

- ¡Lo digo y lo repito sé de un muro que habla! - contestó seria.

- Cuenta Teca -le pedimos.

- En el fondo de este almacén hay una foto grande y antigua que tiene ese muro Cuchumbeo-

- ¿En qué lugar del mundo está ese muro si se puede saber?- grito Alberto. - No sé la dirección -contestó Teca.

- ¿Y cómo sabes que habla?- dijo él.

- Sin tiempo a una pregunta más comenzó:

- Caminaba con Jorgito mi amigo- que solo ella conoce- por un atajo estrecho
del pueblo doblamos a la derecha caminamos 10 0 15 callejones más, volvimos a doblar dimos vuelta a la loma que está ahí mismo y volvimos a caminar 6 callejones.

Jorgito que no se cansa estaba como lechuga fresca yo no podía dar un paso.

- Claro como está gordita comentó Ana Paula. Teca escuchó bien pero continúo.

No es que esté gruesa pero caminamos demasiado así que me senté de espaldas al camino y me quedé dormida. Cuando desperté para continuar un muro cerraba el camino. Miré a Jorgito _¿Y esto? juraría que era un camino, no un muro.

Entonces una voz desconocida contestó: - «Nooo un murooo» - miré a Jorgito sus labios no se habían movido. No había un muro repetí y la misma voz contestó:

-«Nooo habiiia un murooo» -. Nadie ocupaba aquel lugar Jorgito el muro y yo. Cobarde no soy. Grité: _ ¡quién está ahí!_ la voz respondió lo mismo: -
_«quién está ahí»_

Me tranquilicé tomé la mano de Jorgito pegué la espalda al muro para estar
segura que nadie podría esconderse tras de mi. Esperé unos minutos y volví a gritar: -Salgaaa- el intruso respondió lo mismo.

Atrevido quería cogerme que salga él, esperé ni una hoja se movía solo un
ruido como del viento cuando llega el otoño.

_¿Quién es el del cuchucheo?_ Grité y escuché clarito su  nombre-«cuchumbeobeobeo»-.

_Nada que esperar el muro habló, corrí para estar lejos. Habla y eso no tiene que ver conmigo_

Entendí, era el muro de la foto del almacén que debe ser un misterio y el misterio es, que el muro habla.

Allá maestros, investigadores, historiadores yo nada que ver con
muros que hablan.

Seria miró a todos pero comenzó Anastasia luego José Rolando y reíamos todos a carcajadas recogiendo nuestros cuadernos cuando Alberto gritó:

- ¡Eco gordita ¿no sabes lo que es un eco?_

Entre risas la dejamos creyendo en Cuchumbeo, un muro que hablaba.

enero 20, 2011

“La niña que escribe sueños”


                              A Selene.

Lleva a su paso
letras,
para contar.

Narra la vida
cuenta con letras,
pinta los sueños,
ríe sin más.

Busca que busca
entre papel,
sueños y risas
para tejer.

Rima
verdades,
versos y sueños
todo le sale
como tropel.

Paso a pasito
muy despacito,
la niña vive
en un carrusel.

Duerme y escribe
sueña y escribe,
vive entre letras
cuenta qué vive.

Va
despacito
sin descansar,
pinta los sueños,
ríe sin más.

enero 19, 2011

Cosas de Teca (Fragmento)



¡……Corran amigos, corran amigas y cuenten lo que les voy a contar!...

Así grita a voces  mi amiga Teca  para que todos se enteren de las historias que a cada momento se le ocurren.

Es una locura tras otra, su abuela  le enseñó a  leer y amar los libros  así que ella siempre tiene una historia, o un invento,  dándole  vueltas en su cabeza que está llenita de personajes y fantasías.

También creo que  por eso mismo siempre anda entretenida conversando a solas. 

 ¡No, perdón! 

Conversa con personajes de cuentos o lo que es mejor,  en la mayoría de las ocasiones  con los personajes que ella misma crea para sus cuentos.

Y… ¿saben quien es el de casi siempre? pues... Jorgito, un niño de 5 años a quien Teca siempre esta nombrando pero que  nadie a podido ver.

Si camina las calles del pueblo  lo llama o  le habla como si a su lado fuese. 

¡Que cosas  las de mi amiga! 

Si alguien le pregunta:

_Oye Teca ¿con quien hablas?_ seria responde:  

_ ¿ Acaso no ves o que? .Con quien he de hablar. ¡Con mi amigo Jorgito!_.


Cuentan que una vez, una sola vez Teca le contó a los niños del pueblo quien era Jorgito , yo que no estaba allí  les cuento a ustedes,lo que a mi me contaron. 

Pero… no  vayan a repetirlo, porque dicen los adultos que uno no debe repetir lo que otros dicen,  sino lo que uno ve. 

Y claro está,  una se debe callar aunque yo (como seguro ustedes harán), nunca me calle.

enero 18, 2011

Saber más.


Si ya sé contar
también sé leer
ya puedo cantar
jugar, correr.

Lindo es saber
bello, aprender.

Ya sé cantar,
ya puedo leer.

Ya lo sé


Ya aprendí a contar
uno, dos, tres,
Y ya sé leer
mamá, papá, nené,
ahora sé cantar
do, re, mi, fa, sol
ya puedo jugar
¡Amambrochetooo!





enero 17, 2011

Cuando Teca llegó hoy.

Pues mi amiga Teca apareció en la mañana risueña, tranquila, conversadora sin límites como de costumbre.

Sacándome de la cama anunció el motivo de su visita:

_ He andado este fin de semana  páginas y páginas sin parar  ¿sabes qué? solo encontré a tres ¿Puedes creer eso?

Cuando quise responderle, tan solo despegar los labios  siguió sin importarle.

_ Si mi abuela Marga se entera quedaría de una pieza como siempre dice. ¡Tan solo tres!. Es que...

Como justo entonces respiró, ataqué:

_ ¿De qué hablas?_; _¿A qué tres encontraste?_; _¿Qué tiene que ver tu abuela?_.

Como si con ella no hablara siguió sin respirar, sin prestarme atención, sin responderme, sin...


_ ..Nadie se ocupa de contar detalles en este inmenso mundo, veras tú ahora mismo, yo misma, sin ayuda, de porrazo,  sin respiro, ¡tengo un cuento que contar!. Para tontos los adultos, no saben que los niños somos gblrmsd....



Hablando  para sí misma salió por donde entró.

Ahora espero, porque cuando hagamos la tarea en el almacén de la biblioteca por la tarde Teca tendrá un cuento nuevo que  aclare en qué  anda perdida.

Por si acaso ustedes no falten a la cita.

enero 14, 2011

Pssss...oigan, ustedes


Teca a decidido compartir este su espacio con otros amigos, así que anda correteando por todo el pueblo busca que te busca entrevistas. 

Pronto estará aquí de vuelta con nuevos amigos e historias para contar....

De nuevo con Teca. Fragmento de la autora del Blog.



NUESTRO PUEBLO

Cuando Teca habla del pueblo hasta los adultos quedan "bobitos". Es que lo pinta con unas palabras tan bonitas. Trataré de hacerlo como ella aunque  sé que no será igual. Pero lo intentaré.
El pueblo donde nacimos no es cualquier pueblo. 
Atiendan bien porque no quiero que nadie diga después que no cuento nada de este pintoresco lugar donde nacimos mis amigos y yo.
Como todos los pueblos tiene un gran parque en el centro, llenito de árboles: el framboyán es el árbol que identifica el lugar. Altos, robustos, con sus hojas grandes y sus flores amarillas, que perfuman el lugar. 
Miren si son famosos los framboyanes de nuestro parque, que cuando queremos reunirnos decimos:
_ Nos vemos en el parque de los framboyanes_.
No es que el pueblo tenga un solo parque. No de eso nada, es que ¡son tan lindos, esos árboles! y la sombra que nos dan.
Tenemos un correo famosísimo. Es el correo de Tato, el tío de Alberto, mi amigo de la pandilla, que no es famoso por él sino por su tío que siempre lo tiene pintado y porque en las mañanas cuando llega la prensa, él sale sonriente a avisar con alegría:
_ ¡Llego la prensa!_. 
Y para que los adultos se entretengan esperando el turno de comprar, el en voz muy alta les comenta las noticias. Es algo así:
_" El juego de anoche en Guane lo ganó el equipo de Candelaria_" o "_la zafra más grande de nuestra historia, está a punto de culminar. Habrá fiesta en todos los Bateyes desde hoy hasta el día 20_."
Y si se trata de las cartas. Eso si que es alegría en el pueblo. Tato sale después que se venden todos los periódicos, por las casas donde debe dejar la correspondencia.
Aunque lo interesante es lo que dice. Si porque todos los carteros del mundo, como dice Teca, cuando llevan una carta gritan: 
_¡Cartero, carta para…!_ y dicen el nombre del dueño de la carta, sonando alegremente un silbato. Tato no. Escuchen bien como él dice:
   _ Llegó Tato el de las buenas y malas noticias, traigo carta de La Aparicio, para Maria Conciliadora de Mercedes Triunvirato_
 Justo entonces suena su silbato y vuelve a repetir su anuncio. Todos se enteran del remitente y del destinatario. Porque eso mismo es lo que uno escribe en los sobres, el nombre la dirección de quien manda la carta y el de quien la debe recibir.
¡Tremendo que es Tato! A ver que pueblo tiene un responsable de correos, tan eficiente.
Mi pueblo tiene también arroyo, río y un pedacito de mar. Estamos casi pegados a la costa, por eso en las noches, corre una brisa deliciosa y se puede saborear el salitre y el sonar de las olas que vienen y  van.
Las casas. Esas si que son lindas. Todas con sus techos de tejas rojas, que casi las hace ser iguales pero que son diferentes.
Si porque algunos techos son más altos que otros y porque cada vecino pintó  puertas y ventanas de colores diferentes. 
Por ejemplo en mi casa son verdes, pero en casa de mi amiga Anastasia son rojas. Segurito que nunca han visto, ventanas y puertas rojas. Como dice abue, Ramón :
"_Para gusto se han hecho colores y para olores las flores_."
Es tan lindo ver todas las casitas iguales pero diferentes a la vez.
¿Y las montañas? en este país no hay pueblos sin montañas.
Las nuestras son de un carmelita tan intenso que cuando el sol les ilumina la cima parecen rojas. Altas, tan altas, que cuando fuimos con la maestra de excursión, desde allí se veía todo el pueblo enterito. Si señor.
El lugar más importante de mi pueblo es la Biblioteca. Una casona muuuy grande. 
Dicen los mayores que fue un barracón de esclavos en la época en que abue Ramón era apenas un niño. Pero eso no lo cuenta Teca para que no le digan vanidosa, por eso  se los contaré en otra ocasión. 
Solo contaré lo que hace importante este sitio para nosotros, la pandilla.
Tiene  ventanas grandes que se abren por el medio, un lado para un lado y el otro para el lado contrario. Margot, la bibliotecaria, la abuela de Teca les llama: “ventanas de dos hojas”. 
Cuando entras a la biblioteca o a la casona, así también le llamamos. Encontrarás un inmenso salón llenito de mesas y taburetes, grandes o pequeños. En los grandes se sientan los adultos a leer o a estudiar. En los pequeños  claro está, nos sentamos los pequeños  para hacer lo mismo que los adultos, ¿Qué otra cosa iba a hacerse en un salón de biblioteca? 
Aunque bueno  a veces Margot o Marga, como la llaman  organiza mesas y taburetes como si fueran la herradura de un caballo para actividades que ella llama colectivas: leer en voz alta  cuentos, poesías  y otras actividades  que se le ocurren a cada rato. 
Margot, tiene muchas ideas. En eso nadie le gana ni su nieta Teca.
Sigo contándoles como es la Biblioteca.
Después del salón grande hay otro más pequeño, donde hay muchas pero muchas cajitas, llenas de tarjetas. La abuela le llama “control de fondos”. Es el lugar donde buscando en una tarjeta  ella te dice en que estante está el libro que buscas.
Después  un salón más grande que el primero el que contaba  que es para leer y estudiar.  Lleno de altos estantes con divisiones sobre los que descansan todos los libros de la biblioteca. ¡ Como hay libros interesantes!
Por último, subiendo una escalera en el fondo, está el almacen.
El mejor espacio de todos. Al menos para nuestra pandilla. ¿Saben por qué? allí es donde nos reunimos.
Lo organizó Teca para contar sus cuentos, la abuela nos deja estar sin ponerse brava. La única condición  es no tocar las cajas de libros que ella guarda en su almacen.
A todos nos gusta el almacen de la biblioteca. A cada quien por un mismo motivo y por motivos diferentes.
A Alberto le gusta por el olor a libros nuevos, que llegan  desde la ciudad. A José Francisco para estar cerca de Anastasia y de Teca. A Anastasia por lo mismo que a José Francisco. María como es tan callada y penosa, le gusta porque nadie que ella no conozca bien, la puede ver cuando está estudiando.
Ana Paula dice que desde el almacen se ve todo el pueblo y se escucha mejor el trinar de los sinsontes.
¿A mí?, Pues me gusta porque en el puedo reunirme con mis mejores amigos.
¿A todos? Ah, a todos nos gusta, para escuchar los cuentos de nuestra amiga Teca.

Tomado del libro: "Cuentaquetecuento" de la autora del Blog.


Grande muy grande son las ideas de mi amiga.

Aunque todos le seguimos sus historias con ganas, a veces es difícil creerlas. Pero las cuenta con tanta seguridad que no queda más que escucharle.

Esta vez se le fue la olla como diría su propia abuela.

Sentados en la biblioteca hacíamos como cada tarde las tareas de la escuela preocupados y ocupados en hacerlas bien. Mientras la cabeza de mi amiga Teca volaba por otros sitios.

Y es que siempre tiene Teca la cabeza volando. La historia de esta tarde comenzó así:

_¿A que no saben por qué los chinos tienen los ojos y el cuerpo tan pequeñito?-_Nos miró atenta a cada uno, aunque nadie le respondió.


_ ¿No quieren saberlo?_ insistió_ Los chinos están dispersos por todo el planeta_.

Alberto con ganas de mandarla a callar por la interrupción de la tarea expresó:

    _ Si fuesen solo los chinos. En cualquier lugar de este mundo encontrarás, chinos, cubanos, españoles, alemanes...los habitantes de este planeta están por cualquier parte _.

A lo que ella contestó:

_ Pero lo de los chinos es muy diferente, bien lo sé_ Suficiente todos la miramos con ganas de....

Es que... les recuerdo ella no se cansa  cuando quiere atraer la atención es más fuerte que nadie para imponerse.